«Bautizar» el proceso

El Vaticano no respalda el desarme de ETA.

El proceso ha vuelto a renacer, le han vuelto a dar vida. Llevaba un tiempo parado, silente y ETA se ha encargado de reavivarlo con la pantomima de la entrega de armas. Una pantomima sí, si ETA va en serio que se disuelva, que pida perdón y colabore con la justicia. Lo demás son cuentos chinos, o peor, el intento de ganar en la política la batalla que perdió con las armas.

Sí, ETA ha sido derrotada en el plano militar, pero puede que se capaz de ganar en el plano político. Por eso no es correcto decir que ETA ha sido derrotado, que su proyecto ha sido derrotado. Sí, ha sido derrotada militarmente, pero no políticamente. Y para muestra el proceso que ha vuelto a renacer. Un proceso que nadie nos quiere explicar, mostrar pero que pervive cual guadiana. Y ahora ha vuelto a emerger. ¿Por qué ahora? Es difícil saber, quizás por la cuestión de lo presos, no sabemos.

Lo que sí sabemos es que en el proceso se han dado un salto cualitativo. El PNV, como se ve en la foto de la vergüenza, se ha unido al proceso. Hasta ahora no se oponía pero ahora se ha mojado en el proceso. Del PSOE no cabe decir mucho, está desde el principio, no en vano el proceso empieza con Zapatero. Y el resto de los asistentes no son más que satélites del mundo abertzale, jeltzale o socialista. El PP tuvo el decoro de no aparecer en la foto, lo que no sabemos es sí está dispuesto a paralizar el proceso. Hasta ahora, con ejemplos como la excarcelación de Bolinaga o la asunción acrítica y aplicación generalizada de la sentencia del tribunal europeo que rechazaba la doctrina Parot, ha demostrado que asume el proceso. Por eso habrá que estar atentos a la negociación de presupuestos y a las cesiones en política penitenciaria.

Sin embargo, lo más llamativo estos días ha sido el intento por parte de algunos medios de «bautizar» el proceso. Decimos bautizar porque se quiere utilizar la presencia del arzobispo de Bolonia como excusa para argumentar que el Vaticano respalda el proceso de desarme. Y no sólo eso, se explica que lo hace contra la posición cerril de los obispos españoles, en especial los vascos.

Sorprende que unos medios de claro corte laicista, que buscan excluir la presencia de la Iglesia Católica del ámbito público, acudan a esa misma institución en un intento de legitimar un proceso que como decimos es injusto con las víctimas y que no es tanto el rechazo a un proyecto terrorista sino la búsqueda de una victoria política que las armas no pudieron dar.

Pero este intento de «bautizar» el proceso es vano. Monseñor Munilla, obispo de San Sebastián, ha explicado en su programa de radio Sexto Continente (Radio María), que el arzobispo de Bolonia estuvo a título personal y que su presencia no supone ninguna implicación ni aceptación de la Iglesia Católica del proceso de desarme. Ha explicado también como el obispo de Bayona ha hecho una declaración señalando que la Secretaria de Estado Vaticana le ha comunicado que en ningún momento ha dado el placet ni le ha sido solicitada autorización, ni ha mandato como representante al arzobispo de Bolonia a la acto de entrega de armas.

Así que no metan a la Iglesia donde ella no quiere estar. Pero la duda que nos queda es, ¿por qué? ¿por qué hay que meter torticeramente a la Iglesia en esto? ¿Será que el proceso no es tan bueno como nos dicen y entonces hay que tratar de legitimarlo como sea?

Mi querida y perpleja España.



Categorías:ETA, Separatismos

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2 respuestas

  1. Satanás trabaja activamente en España.

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