Una antídoto contra la hiperregulación.
Publica El País que la inestabilidad política deja en mínimos históricos la actividad legislativa. Entre los Gobiernos de Rajoy y Sánchez de la última legislatura se han aprobado 106 leyes, la mayoría por decreto ley.
Algunos pueden pensar que esto es una mala noticia. En Mi Querida España nos parece buena. No es soportable para el ciudadano normal (padres, empresarios, trabajadores, educadores, …) el nivel de regulación que existe. Cada vez nos dejan menos margen la para libertad personal en nuestro día a día. Por eso nos congratulamos de que esta situación de inestabilidad política al menos esté protegiendo al español contra el empeño de nuestra clase política de regular todos los aspectos de nuestra vida.
Esto no es un alegato contra el gobierno ni contra la autoridad, necesarios para la consecución del bien común, sí es un alegato contra el intervencionismo que se ha convertido en conducta habitual de todos los gobiernos de la democracia. Sería bueno que esta “parálisis legislativa” se convirtiera costumbre de los gobiernos no en funciones.
Mi querida y aplastada España.
Categorías:estatalismo, estatismo, Libertad
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