Los socialistas son unos pseudorevolucionarios venidos a menos. Felipe González intento pasar a una social-democracia homologable con Europa, pero sus gentes siguen teniendo un tic marxistoide, quizás involuntario o quizás nostálgico. Después de la caída del muro y de leer a Solzhenitsyn cualquier cosa que huela a revolución huele a cuerno quemado. Así huelen Corea del Norte, Cuba o Venezuela.
España no les importa, son españoclastas. Carecen de autocrítica histórica, soberbios aunque van de humildes. Ignorantes y arribistas. Como decía la abuela, con las izquierdas siempre pobreza, con las derechas trabajo.
Los socialistas son unos pseudorevolucionarios venidos a menos. Felipe González intento pasar a una social-democracia homologable con Europa, pero sus gentes siguen teniendo un tic marxistoide, quizás involuntario o quizás nostálgico. Después de la caída del muro y de leer a Solzhenitsyn cualquier cosa que huela a revolución huele a cuerno quemado. Así huelen Corea del Norte, Cuba o Venezuela.
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España no les importa, son españoclastas. Carecen de autocrítica histórica, soberbios aunque van de humildes. Ignorantes y arribistas. Como decía la abuela, con las izquierdas siempre pobreza, con las derechas trabajo.
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Pienso que en los Gobiernos socialistas del siglo XX y XXI, han sido permanentemente un desastre. Ha sido empírico.
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